Salir a comer con niños no siempre es fácil, ya que muchos restaurantes no están preparados para atender a las necesidades de los más pequeños. En el post de hoy os hablamos de diferentes restaurantes donde los más pequeños se convierten en los protagonistas: platos especiales para ellos o juegos que los ayuden a distraerse mientras esperan la comida.
En el centro de Barcelona encontramos Davida Market un grandioso restaurante con distintos espacios. El concepto es dividir el espacio en siete paradas donde encontrarás diferentes especialidades de la gastronomía italiana: ensaladas y tapas, pasta, pizza, carnes, pastelería, la de helados caseros y la parada de bebidas. Este local es perfecto para ir con niños, ya que su concepto los anima a que sean ellos mismos quién van a buscar el plato más les gusta en la parada correspondiente, y se lo llevan a la mesa. Una buena forma de pasarlo bien mientras comen.
Si queréis aprovechar los fines de semana soleados, tenéis que desplazaros hasta la Barceloneta y reservar mesa en El Xiringuito de Escriba. Cocina marinera sencilla donde encontramos paellas, mariscos y una carta especial para los más pequeños. Además que el restaurante esté tocando la playa permite que los niños puedan salir a jugar mientras los mayores disfrutan de la última copa de vino.
Hay noches que los niños no perdonan no comer una buena hamburguesa. Situado en el barrio de Sants o en el centro, Santa Burg es la hamburgueseria perfecta para ganaros a los más pequeños. Carnes y panes de calidad en un ambiente donde se sentirán protagonistas. ¡Hamburguesas, nuggets, patatas caseras y mucho más!
A veces las comidas diferentes gustan mucho, y ¿qué mejor que un día de crepes con los pequeños de la casa? En Creps Barcelona podrás degustar deliciosas creps y galettes dulces y saladas al más puro estilo francés. Una buena excusa para enseñarles la gastronomía de otros países del mundo.