Chufa, agua, limón, azúcar y canela. Con la combinación de estos ingredientes se elabora una de las bebidas veraniegas más deliciosas: la horchata. Una bebida que apacigua el espíritu y endulza el alma con la que podremos revivir nuestra infancia desde el primer sorbo. En este post veraniego hemos reunido algunas de las horchaterías más emblemáticas de Barcelona y Madrid, la mayoría de ellas con varias décadas de historia a sus espaldas. ¿Las conocéis?
BARCELONA
Sirvent (Parlament, 56)
El clásico entre los clásicos y para muchos la mejor horchata de la ciudad. 85 años de experiencia en la elaboración artesana de turrones, helados y horchata avalan su sello. La cadena Sirvent cuenta con dos establecimientos en la ciudad, uno en la calle Balmes y otro, el emblemático, en la calle Parlament. Merece la visita de cualquier fan de la chufa que se precie como tal. ¡No os la perdáis!
Planelles Donat (Portal de l’Àngel, 25)
Otra institución barcelonesa de la chufa, cuyo local fue reconocido como establecimiento emblemático de la ciudad en 2014. Se encuentra en pleno centro y por ello, habitualmente encontraréis mucho público extranjero. Esta empresa familiar, que además de varios establecimientos cuenta con una tienda online, elabora una horchata tradicional y purista con chufa de la región de Alboraya que no contiene ningún conservante ni está pasteurizada (por ello sólo aguantará 2 o 3 días máximo). También elaboran horchata sin azúcar.
Tío Che (Rambla del Poblenou, 44)
Nos desplazamos a Poblenou, cerca de la playa, para encontrar nuestra siguiente propuesta. Originarios de La Nucía, Alicante, la horchatería Tío Che refresca los días de verano desde el año 1912 (la familia llegó a Barcelona con la intención de emigrar a Argentina). Cuatro generaciones de horchateros han servido a la clientela más gourmet y exigente. Además de horchata os recomendamos su estupenda leche merengada. Ideal para un paseo familiar por el Poblenou.
Miquel (Ronda de Sant Antoni, 102)
Nuestra última propuesta está en de vueltas en Sant Antoni, muy cerca de la Plaza Universitat, y no es tan conocida como las demás, pero seguro que no os defraudará. Se trata de un local pequeño sencillo, de los de toda la vida, que se ha convertido en un santuario entre la comunidad horchatera, gracias a su excelente producto. También preparan granizados naturales, helados y yogur helado. Es el lugar perfecto para aislaros un momento del bochorno estival si visitáis el centro de Barcelona o el Raval.
MADRID
Alboraya (Alcalá,125)
Nuestra primera parada es la institución horchatera en Madrid por excelencia: Alboraya. Los propietarios, José Luis y Fina, se trajeron la receta de su familia y abrieron su primer local en 1980. Hoy en día, la tercera generación de esta familia de horchateros, mantiene la misma pasión. Producen hasta 200 litros diarios de horchata con chufa. El espacio cuenta con una terraza para disfrutar mejor de la mejor horchata líquida acompañada de sus deliciosos fartons. También tienen servicio de reparto a domicilio. Un imprescindible.
La Fábrica de Siempre (Pedro Tezano, 11)
En la zona de Tetuán encontramos La Fábrica de Siempre, una horchatería que arrancó hacia los años 40 como puesto ambulante en Cuatro Caminos. El cuidado y el esmero que pone la familia en su producto se nota. Además de horchata elaboran también leche merengada, helados, granizados, limonadas y la ya extinguida agua de cebada, una bebida que ya no se encuentra. Regentado por varios famosos, está muy bien de precio y es otro ‘must’ del panorama madrileño de la chufa.
Heladería los Alpes (Arcipreste de Hita, 6)
Fundada en 1950, Los Alpes es la heladería más antigua de la ciudad de Madrid. Además de sus codiciados helados (de más de 80 sabores diferentes) su horchata también está considerada, como no podría ser de otra forma, entre las mejores de la ciudad y cuenta con denominación de origen de chufa de Valencia. Actualmente tiene dos tiendas de venta al público. La de “toda la vida” en el barrio de Chamberí y la de Torrelodones. Su experiencia no defrauda. Si estáis por la zona, no perdáis la oportunidad de visitarla.
El Kiosko de Horchata (Narváez, 8)
Nuestra última propuesta es original y simpática. Se trata ni más ni menos que del pequeño kiosquito blanco y azul de la calle Narváez, que tiene el honor de ser el último establecimiento de venta de horchata a pie de calle abierto en Madrid. Miguel y José, sus propietarios, siguen 80 años de tradición y mantienen la misma receta de horchata que preparaban sus bisabuelos. Si vais probad también su limón Granizado o su agua de cebada. Un local auténtico de los que ya no quedan.